LLEGARON LOS REYES
El lunes por la mañana los reyes magos dejaron en casa un saco grande de papel bien cerrado que contenía un regalo muy esperado. La verdad es que el saco era muy bonito, de papel kraft con estampados de hojas en verde.
El contenido da un poco de susto, porque son unos pocos palitroques con raíces que, supuestamente, están llamados a convertirse en maravillosos rosales pero, de momento, son sólo un proyecto.
Ahí los teneis, en remojo, tal como los dejé la noche del lunes al martes, preparándose para la plantación.
Ayer a mediodía, en cuanto llegué a casa y prácticamente sin comer, me puse a la tarea. Afortunadamente el trabajo más duro estaba ya hecho y encima esta vez tuve ayudantes de lujo, con mis amigos Rosa, Tita y Manuel, además del artista, claro, así que las cosas se simplificaron bastante.
Los primeros en ser plantados son los que van en los "lagos de Covadonga", a la entrada del jardín.
A la izquierda de la foto tres pies de "Jude the Obscure" y a la derecha otros tres de "Gertrude Jekyll"
En la jardinera que está junto al garaje he puesto un trepador amarillo claro llamado "The Pilgrim", que hará buena compañía al solanum y a las fucsias.
En este lado, que está más cerca de donde paso más tiempo en verano, he puesto otros siete rosales: uno trepador dentro de la tinaja, "A Shropshire Lad", para que suba luego por el tronco castrado de la higuera.
A la izquierda, junto a la tinaja, tres ejemplares de "Jubilee Celebration" y a la derecha, en la parte más alta, otros tres de "The Generous Gardener".
Aunque trataba de evitarlo, al fondo se adivina el horrendo cajón del compost, todavía sin pintar; menos mal que el seto de hipérico que tiene delante no deja verlo desde la entrada y la casa.
Aún faltan dos rosales más. Aquí, junto a la puerta de la cocina (justo al lado de la fucsia de la foto), he puesto un trepador llamado "St. Swithum", para que con su delicadísimo color rosa porcelana destaque sobre la pared oscura y además porque su perfume me alegrará las cenas y las comidas de los días de verano.
Y, por último, en el porche del sur hemos puesto otro ejemplar de "A Shropshire Lad", también de color claro porque allí la pared también es verde oscuro.
Aunque os parezca un capricho estúpido, hace mucho tiempo que buscaba rosales como los que acabo de plantar, es decir, rosales antiguos, de rosas dobles y efímeras, olorosas y de colores suaves. Sobre todo, muy, muy aromáticos y también de vegetación vigorosa y saludable. Estos parece que reúnen estos requisitos, al menos David Austin, el cultivador que los vende, tiene prestigio en todo el mundo.
Si os gustan los rosales, os invito a visitar su página, es una gozada ver ese despliegue de belleza.