Buenos días, preciosas, ¿habéis descansado bien?, ¿se encuentran las telas, los hilos, las agujas, la tijera y el libro de Marie Suarez ordenados y dispuestos en su bolsa-neceser-caja o cesta especial?. Muy bien, porque ha llegado el día 15 y en cuestión de horas una nueva entrega de esta larga novela llegará a los buzones para teneros entretenidas todo el fin de semana.
Bueno, qué digo todo el fin de semana, seguramente toda la semana o todo el mes, quizá algo más; cada una le dedicará el tiempo que necesite sabiendo que será un tiempo de disfrute y de relax.
"Piano, piano, ci và lontano", dicen los italianos y así, pasito a pasito, poco a poco, hemos llegado al ecuador de nuestro SAL, la etapa número 6 de las 12 que compondrán el libro de los bordados, ese que ya ahora mismo contemplamos con ojos asombrados, como si no creyéramos haber sido capaces de hacer algo tan bonito.
Una nueva etapa muy fácil, divertida, con un guiño al patchwork que, por su actualidad, merece la pena conocer y que se vuelve cómplice del bordado para enriquecer nuestros trabajos y aportarles color. Pienso que será un juego componer ese puzzle corazón, incluso para aquellas que nunca han hecho patchwork, porque la inestimable ayuda del papel termoadhesivo convierte en un juego de niños esa pequeña incursión en el aplicado.
Observareis que la composición de esta página está un poco alterada con respecto a la original y eso es debido, como es natural, a que nuestro libro tiene formato vertical, mientras que el modelo de Marie estaba planteado en sentido horizontal. Salvo este detalle, yo creo que reproduce fielmente al original.
Como todas las hojas de esta nueva fase, la página par vuelve a ser una página de título, con una sencilla orla de adorno compuesta por puntos ya conocidos y la etiqueta del título, con el formato que mantendremos hasta el final.
Creo que esta nueva etapa ayudará, igual que la anterior, a las que vais con retraso, para que recupereis un poco de tiempo, pero no descuideis demasiado, porque las que faltan serán más laboriosas y hay que tomar aire.
Con esto ya tenemos medio libro y esto empieza a tener una entidad importante, incluso si nos cansáramos en este punto podríamos encuadernar las seis páginas y tendríamos un estupendo libro. Pero sé que no nos vamos a rendir y que estais deseando sacar tiempo para completarlo y alcanzar el grado de "Gran enciclopedia del bordado", que es como va a terminar este año de trabajo.
No he podido evitar hacer algunas pruebas y, como sé que muchas estais intrigadas acerca del tamaño, el aspecto, la funcionalidad, que tendrá el libro terminado, he hecho pruebas con las seis páginas ya terminadas y tengo que deciros que me he relamido de gusto, de lo bonito que puede quedar.
Como sé que mucha gente estará intrigada por detalles como este, incluso he tomado medidas y de momento, las seis páginas colocadas alcanzan un grosor de casi 2 cm, lo que hace fácil calcular que el libro entero alcanzará un grosor de unos 5 cm incluyendo las tapas, un grosor perfecto para una gran enciclopedia como las que estamos acostumbradas a conocer. ¿O alguien se tomaría en serio una enciclopedia que no sea un "libro gordo? Bueno, bromas aparte, pienso que ese es un detalle sin ninguna importancia en una obra de estas características, sobre todo porque nunca lo guardaremos en la biblioteca con el resto de los libros, sino en la caja de los tesoros, que es donde merecerá estar.
Obviamente, todas sabemos aquello de que "el tamaño no importa" y esta imagen habla por sí sola de lo que realmente a mí me importa en este SAL que he pensado, meditado y calculado hasta el útlimo de sus detalles y es la COHERENCIA, el respeto hacia la fuente original, la fidelidad a un espíritu y creo que eso lo he conseguido. Pienso que es evidente que nuestras hojas bordadas parecen salidas directamente del interior de esas tapas de cartón y eso me dice que he acertado con el planteamiento.
Nunca me hubiera atrevido a embarcar a tanta gente en un proyecto tan costoso sin estar antes segura de tenerlo todo bien preparado y para poder ofrecer esa seguridad, cuando vosotras recibisteis la primera etapa yo ya llevaba tres meses haciendo pruebas, de telas, de hilos, de colores, de rellenos, con guata, sin guata, con entretela, sin entretela, con relleno, sin relleno, vertical o apaisado, etc., etc.
Teniendo en cuenta, además, que soy la reina de la indecisión, solo las que me conocen muy bien saben lo machacona que me puedo poner cuando estoy preparando algo así: no duermo, no pienso en otra cosa, no hago caso a nada más, no me ocupo de nada más. Por eso, a medida que veo el proyecto avanzar, necesito estas afirmaciones para calmar la preocupación y hoy, cuando se me ocurrió colocar todas las hojas juntas y hacer esas pruebas que os muestro, he empezado a relajarme y a creer que vamos bien de verdad. Espero que a vosotras os parezca lo mismo.
Feliz fin de semana, feliz mes, feliz etapa de SAL. No perdáis la ilusión, merece la pena terminarlo, de verdad.
Un abrazo a todas