MONEDERO DE BOQUILLA

Mis comienzos en la clase de patchwork coincidieron en el tiempo con la época de la Navidad, que las responsables de "Lunares" decidieron celebrar regalando a cada alumna los patrones y material para hacer un pequeño monedero de boquilla metálica cuyas técnicas de realización constituyeron el tema de las clases del mes de diciembre.Esto me vino muy bien porque ya tenía desde hace tiempo la curiosidad por aprender a montar este tipo de bolsos y de paso he aprendido muchas pequeñas cosas importantes y básicas del patch: cortar y coser  piezas geométricas , bordar sobre las costuras, acolchar a mano, ....Una vez terminado mi primer monedero, pude estudiar atentamente los fallos que había cometido y enseguida  comencé otro igual con el fin de corregir todo lo que estaba mal; desde luego, aún tengo que pulir cosas, pero ha mejorado bastante.

Este es el primer experimento, en el que se ven claramente los defectos de los pequeños hexágonos. Esto ha sido una prueba dura para mí porque manejar esas piezas tan pequeñitas me resulta dificilísimo. Además, tuve que ver este resultado para comprender por qué la profesora insiste siempre en que dediquemos tiempo a trazar y recortar con toda precisión las plantillas y las telas, porque eso mejora notablemente el acabado. Lección aprendida :))

En este segundo intento tuve en cuenta todo lo analizado y ya los hexágonos están mucho mejor encajados, de hecho me costó mucho menos unirlos, porque estaban mejor cortados e hilvanados. He puesto al lado la tijerita de bordar (10 cm de largo) para que podáis haceros una idea de la escala real, ya que las fotos hacen parecer las cosas más grandes y en realidad es pequeñito, muy coqueto.

La otra cara, en la que he practicado diferentes puntos de bordados lineales, divertidísimos de hacer y que cambian completamente el aspecto de las rayitas de tela. Realmente parecen demasiadas cosas para un objeto tan pequeño pero finalmente queda muy gracioso,  Lástima que los colores no están demasiado favorecidos en la foto.

La boquilla es doble, con lo que tenemos un monedero de dos departamentos con separador intermedio. Ya os dije que hemos aprendido un montón de cosas en este pequeño trabajo y es que este montaje, sin alguien que me lo enseñara directamente, no habría sido capaz de hacerlo con un tuto a distancia, es más complicado de lo que parece.

Otra buena cualidad de estos trabajos pequeños es que permiten aprovechar hasta los más diminutos restos de telitas, que es una de las cosas que me gustan mucho del patchwork, porque me encanta llenar cestas con trocitos de todo tipo de materiales (telas, puntillas, cintas, papeles, lanas....) y así siempre se encuentra lo necesario para improvisar en cualquier momento.

Las telitas proceden de un proyecto un poco más grande, que será pronto mi bolsa para la clase de patchwork y las he comprado en Lunares*. Los  bordados y la costura de la boquilla están hechos con  perlés Valdani.

(* La tienda física Lunares aún no tiene operativa su página web, por eso os pongo siempre el enlace a su versión virtual "Quilthouse", a través de la cual podeis conocer parte de sus trabajos e incluso adquirir algunas cosas online)

Y aquí los dos juntos para poder compararlos. Lástima de luces, que cambian completamente los colores. Voy a estudiar cómo corregir estas cosas (sin tener que ir a clases de fotografía, jjjjjjjj)