Muchas de las personas de mi generación crecimos musicalmente junto a los Beatles y sus canciones nos han acompañado durante toda la vida. Aun sin saber inglés hemos tarareado desde siempre esas melodías inolvidables y muchas forman parte inseparable de nuestros recuerdos. Por eso, pese a que no sé una palabra de inglés, cuando leí el texto bordado en esta ocasión tuve un pálpito y me puse a buscar enseguida porque asocié "In my life" a una de esas canciones y desde luego no me había equivocado.
Así que ahora tengo un doble motivo para estar emocionada con mi nueva libreta de notas: uno, porque es preciosa, elegante, refinada y diferente. Y otro, porque encima lleva escrito un verso de esa canción:
"Some are dead and some are living (Algunos han muerto y otros viven
In my life I've loved them all" En mi vida los he amado a todos)
Bueno, qué digo dos motivos, tengo tres, porque el tercero es que desde que empecé a discurrir cómo hacer el SAL he necesitado un cuaderno en el que tomar notas, dibujar bocetos, calcular costes y ahora, sobre todo, pasar lista, porque las niñas de la clase de bordado son numerosas y algo revoltosillas y necesito tenerlas controladas 
Y es que,desde que empecé este proyecto, solo me apetece rodearme de accesorios preciosos y me paso el día colocando del derecho y del revés las telas, los hilos, las tijeritas, mi cuaderno, todo dispuesto para disfrutar del momento de bordar un poquito.
Hacía ya muchos meses que había comprado este gráfico de The Drawn Thread en La Casina Roja y no lo había bordado por temor a no ser capaz, porque la tela de color "Raw linen" me cuesta muchísimo a la vista y algunos de esos preciosos puntos especiales son también una auténtica tortura cuando no se ve bien.
Pero fue empezar a bordar y ya no pude parar hasta terminarlo; siempre es una delicia bordar los Drawn Thread, por la delicadeza de sus diseños y por la mezcla perfecta de punto de cruz y otros puntos especiales, también en cierto modo una lección de bordado, porque sus gráficos y explicaciones son impecables y detalladísimos.
Este modelo estaba pensado en su origen para forrar un album de fotos, con lo cual el texto tendría más sentido ("Los he amado a todos", en referencia a las personas que pudieran aparecer en las fotografías), pero como yo soy dueña y señora de mis decisiones de bordado y como necesitaba de ese cuaderno de notas pues elegí prescindir del album de fotos y adapté el formato y el tamaño para que sirva de forro a un cuaderno corriente y así poder reutilizarlo una y otra vez hasta que la tela se caiga a pedazos.
Ya veis que un cuaderno de espiral tan normalito encaja perfectamente y es fácil de sustituir cuando se llene o se estropee.
La contratapa, también preciosa, con una casita que se parece a la mía y el año de reaalización de este trabajo.
Para el interior nada mejor que uno de esos maravillosos linos estampados que encuentro en Lunares Patchwork
Para cerrarlo no pude evitar el toque romántico y le he colocado un lazo de organza blanca.
Esta es una de las muchas labores que pienso compatibilizar con las etapas del SAL, porque se ven tantos modelos tan preciosos que es imposible dejar de hacerlos, así que no me queda más remedio que organizarme y encontrar el tiempo para repartir mis puntadas.