C'EST NOËL
Ya conocéis los trabajos de Marie Suarez: delicadeza, minuciosidad, perfección técnica, variedad de puntos y de pequeñísimos detalles,...sus obras desprenden siempre raudales de imaginación, toda la energía que ella posee y que pone en todo lo que hace.
En esta nueva aventura en el mundo del fieltro, hemos conocido por el momento los adornos navideños, una "folie" de calcetines, manoplas, bolas, muñecos de nieve, estrellas y galletitas de jengibre, aderezados con corazones de todos los tamaños, forman un mundo de fantasía que transporta directamente a la magia navideña de las historias infantiles.
He empezado por el panel, que reúne toda la iconografía en un solo objeto, pero desde luego ha sido un trabajo tan agradable, divertido y fácil que seguramente continuaré haciendo más cosas porque la preciosa carpeta en que se presenta esta propuesta está llena de ideas para fabricar todos los adornos necesarios para llenar el árbol y más.
La combinación de colores elegida por Marie es perfecta, muy dentro de su estilo personal siempre contenido y elegante y, desde luego, muy navideño : gris, rojo, verde y blanco. Esa sabia medida en el uso del color es lo que hace que pese a la profusión de detalles el conjunto sea tan armonioso y delicado.
Los sencillos puntos empleados y la facilidad con que se trabaja el fieltro ponen esta labor al alcance de cualquiera; no hace falta saber coser, ni bordar, ni ser experta en nada. Todo está, además, tan bien explicado, dibujado y detallado en los patrones que basta saber usar el lápiz y el papel de calco para pasar un montón de ratos entretenidos.
Creo que sería una labor preciosa para hacerla junto con los niños de la casa, que pueden colaborar transfiriendo los dibujos, recortando, planificando el panel y haciendo ellos mismos los adornos para el árbol. Disfrutarían muchísimo y seguro que con sus pequeñas manitas recortarían mejor que vosotras esa piezas tan diminutas. Además el fieltro, que no se deshila, es un material perfecto para los peques y esos puntos sencillos la mejor lección para que empiecen a coser. Bueno, veo que me ha salido la vena didáctica pero si tenéis niños hacedme caso, aquí teneis un entretenimiento para compartir con ellos en los próximos y fríos fines de semana.
Todavía sobra tiempo para hacerlo porque se tarda muy poco realmente. Tanto los materiales como la carpeta los podéis encontrar en "La Casina Roja" y con las planchas de fieltro del panel, bien aprovechadas, alcanza para hacer muchos detallitos más. En ellos estoy.
Cada detalle es más encantador que el anterior y cuando lo empiezas no quieres parar. Yo tuve que ponerme una disciplina para no abandonar otras labores que me cuestan más trabajo. Así que solo me permitía panel un ratito al día, como quien come una golosina. Claro, además de divertido, aquí no hace falta lupa, ni forzar los ojos, ni discurrir nada y por eso engancha.
Cada detalle nuevo es más gracioso que el anterior, no podría elegir cuál me gusta más.
Los lacitos que rematan las tiras de colgar, con su estrellita de nácar, perfectamente integrada con el resto.
Para forrar la trasera he recurrido nuevamente al fondo de armario en el que había, precisamente, una tela de pequeño estampado navideño que encaja perfectamente con el tema.
Una lluvia de estrellas, unas aplicadas, otras bordadas, iluminan la tierna escena que nos llena el corazón de nostalgia.
Y como este es el año en que me dio por los adornos navideños (esperad a ver lo que llega desde La Casina roja, jjjjjj) dentro de nada tendré que dibujar unos planos para organizar bien dónde voy a colocar todo mi arsenal; de momento ando con el panel de allá para acá, buscando el lugar más adecuado. Hombre, el montón de la leña es muy fotogénico, pero tiene inconvenientes, jjjjjj
En cualquier caso, os animo a hacer este trabajo, os aseguro que será feliz Navidad incluso mientras lo hacéis.