Dentro de pocos días recibiré la visita de Violeta, así que he hecho un hueco entre otras labores que traigo entre manos para hacerle este muñeco que se unirá enseguida con otras dos conejitas que ya tiene en su casa desde hace tiempo y que no tuve, en su momento, ocasión de enseñaros.
Se trata de uno de los conejitos de la pandilla "Little cotton rabbits", realizado según los patrones de la creadora Julie Williams que podéis encontrar en su blog y en Etsy o Ravelry.
Esta diseñadora vende a través de ETSY magníficos patrones para tejer una gran cantidad de animalitos con increíbles colecciones de vestidos o jerseys y de verdad que cuando empiezas a tejerlos ya no puedes parar, porque están tan bien explicados y son tan bonitos que no dan ninguna pereza. Además, se tejen con restos de lanas que tengamos por casa y es una preciosa forma de aprovechar y hacer limpieza en las bolsas del punto.
Me encanta hacer muñecos, sean de trapo o de punto y tener nietos es la excusa perfecta para dedicar un rato de vez en cuando a esta afición. Así yo me entretengo y (supongo) los niños se divierten a la vez que van teniendo recuerdos de su abuela. Ahora, viendo lo gracioso que ha quedado el conejito, tengo que hacer otro para Max y regalárselo cuando venga a casa.
Este pequeñajo está hecho con lana 100 % peruana de la marca "Cascade", comprada por internet en Deramores y la ropa está hecha con restos del algodón Natura de DMC y lana Bambini para el pantalón.
Todas y cada una de las piezas están perfectamente explicadas hasta el más mínimo detalle en las instrucciones elaboradas por su creadora, incluyendo la cantidad exacta de lana necesaria y aunque están en inglés y yo no tengo idea de ese idioma, una vez que he recurrido un par de veces al Google translator, le voy cogiendo el tranquillo y enseguida todo marcha sobre ruedas. Yo creo que si ahora me dan unas instrucciones en español, igual no las entendería tan bien. Paradojas de la vida
Cuando empecé con estos muñecos, lo primero que hice fue hacer acopio de restos de lana que pudieran serme útiles, preparar ovillitos de todos los colores posibles y reunirlos en una cesta, junto con las agujas apropiadas, para así tenerlo todo a punto en cualquier momento que se me ocurra tejer una oreja, un brazo, una manga, etc. De este modo, también tengo controlados los sobrantes que se van acumulando en miles de bolsas al fondo de un armario y, cuando termino alguna otra labor de punto, antes de guardar los restos que me queden, ya preparo el ovillito correspondiente para añadir a la cesta de muñecos, porque nunca se sabe qué color puede hacer falta la próxima vez.
Yo espero que a Violeta le guste este nuevo amigo y que le ponga nombre en cuanto lo vea, como hace siempre con los muñecos, pero si a ella no le hace gracia igual se lo damos a Romeo, el gato que, como veis, se mostró muy interesado en el bicho cuando yo intentaba hacerle las fotos, de hecho no quería separarse de él y pasamos un rato muy divertido intentando apartarlo de su muñeco.
Ahora apetece intentar, antes del próximo domingo, hacer algún jersey más para que el conejito pueda cambiarse de traje, porque la colección de modelos disponible es tan amplia y tan espectacular que apetecen todos, aunque pensándolo bien, si me lanzo a tejer voy a tener que fabricar un armario para guardar la ropa, así que más valdrá que me contenga.
No me negaréis que apetece ponerse a tejer de inmediato, hacer una familia entera de conejitos que llenen todos los rincones del jardín y nos hagan reir con sus travesuras. Romeo estaría encantado, como los niños y yo misma, porque me gustan tanto que no descarto hacerme alguno para mí.
Por supuesto, tratándose de juguetes para niños y niñas pequeños, deben ser totalmente lavables y no contener piezas que puedan desprenderse, para que puedan jugar con total seguridad e higiene. Eso exige que siempre tengamos que elegir fibras que sean, no solo lavables, sino antialérgicas y que no suelten pelusas que podrían molestar a los niños. Entre las opciones más recomendables están los dulces algodones "Natura" de DMC o las lanas merino "superwash", que encontramos de muy distintas marcas.
En cuanto a las agujas, para estos y otros trabajos de ropa para bebés y niños, yo uso las "Karbonz", por su ligereza, flexibilidad y facilidad de manejo.